viernes, 1 de octubre de 2010

"NO, LO SIENTO NO PUEDO"

“NO, LO SIENTO PERO NO PUEDO”

¿Cuanto te cuesta decir que “no”?

¿Puedes cumplir con todas las promesas que haces?

¿Te olvidas de tus prioridades?

¿No te alcanza el tiempo?

A todos nos ha pasado que decimos “si” cuando en realidad queremos decir “no”.

El problema de no saber decir “no” es que después tenemos que afrontar las consecuencias y nos obligamos a vivir situaciones que no deseamos.

Lo que nos esta sucediendo cuando no sabemos decir “no” es que estamos violando nuestros derechos al no ser capaces de expresar nuestros sentimientos, pensamientos y opiniones, permitiendo implícitamente que los demás los violen también.

¿Cuantas veces te has sentido culpable por decir “no”?

¿Cuantas veces para evitar situaciones de conflicto cedes a situaciones que te molestan e incomodan?

¿Cuantas veces por quedar bien aceptas compromisos que no deseas?

¿Cuántas veces por querer tener la aceptación de los demás te has llenado de tareas que no puedes cumplir?

¿Crees que las necesidades del otro son mas importantes que las tuyas?

“No” es una palabra cargada de poder, y tienes que aprender a utilizarla correctamente. Eso quiere decir que la próxima vez que alguien te pida que te olvides de tus prioridades, valora el costo que esto tendrá en tu tiempo, tus proyectos y actividades personales.

Una de las cosas mas importantes para aprender a decir “no” es reconocer cuales son tus necesidades y deseos.

Pregúntate si lo que te están pidiendo es algo que realmente quieres hacer y tomate tu tiempo para responder. Pregúntate si tienes el tiempo para realizar lo que te están pidiendo, evalúa tus prioridades y busca alternativas.

Si vas a decir “no” se amable y sincero y hazlo con la seguridad de que es tu decisión y de que tienes todo el derecho a negarte, recuerda que es señal de una autoestima saludable saber decir “no”.

Las personas que practican el saber decir “no” con asertividad logran sentirse bien consigo mismos y con los demás, tienen el control de las situaciones que se les presentan y se ganan el respeto de los demás.

Recuerda que tu vida son tus elecciones, y decirle “no” a otro es decirte “si” a ti mismo.

Poema de Hugo Flikenstein

No

No es no, y hay una sola manera de decirlo.

No.

Sin admiración, ni interrogantes, ni puntos suspensivos.

No, se dice de una sola manera.

Es corto, rápido, monocorde, sobrio y escueto.

No.

Se dice una sola vez,

No.

Con la misma entonación,

No.

Como un disco rayado,

No.

Un No que necesita de una larga caminata o

una reflexión en el jardín no es No.

Un No que necesita de explicaciones y justificaciones,

no es No.

No, tiene la brevedad de un segundo.

Es un No, para el otro porque ya lo fue para uno mismo.

No es No, aquí y muy lejos de aquí.

No, no me deja puertas abiertas ni entrampa con esperanzas,

ni puede dejar de ser No, aunque el otro y el mundo

se pongan patas arriba.

No, es el último acto de dignidad.

No, es el fin de un libro, sin más capítulos ni segundas partes.

No, no se dice por carta, ni se dice con silencios,

ni en voz baja, ni gritando, ni con la cabeza gacha,

ni mirando hacia otro lado, ni con símbolos devueltos;

ni con pena y menos aún con satisfacción.

No es No, porque no.

Cuando el No es No, se mirará a los ojos y el No se descolgará

naturalmente de los labios.

La voz del No, no es trémula, ni vacilante, ni agresiva y no deja duda alguna.

Ese No, no es una negación del pasado, es una corrección del futuro.

Y sólo quien sabe decir No puede decir Sí.

miércoles, 25 de agosto de 2010

YO TROPIEZO, TU TROPIEZAS, EL TROPIEZA...

Yo tropiezo, tu tropiezas, el tropieza…

¿Quien no tiene tropiezos en su vida personal o profesional?

¿Quién no desea cambiar algo que no le funciona como quiere?

Los seres humanos no somos perfectos. Lo que tenemos que hacer es aprender de cada situación que se nos presenta, aprender de nuestros éxitos y nuestros errores. No hay fracasos solo resultados, si el resultado no es el que esperamos solo significa que hemos aprendido algo.

Todos tenemos dentro de nosotros las condiciones que necesitamos para lograr lo que deseamos, solo tenemos que activarlas.

Es importante re-conocer que es lo que queremos cambiar, que es lo que nos incomoda, la situación que nos molesta, ser sinceros con nosotros mismos y detectar cuales son las formas que usamos para sabotearnos que nos impiden alcanzar el éxito en los objetivos o metas que deseamos.

¿Qué es lo que te impide avanzar?

Tus creencias limitantes te estancan, y en este caso solo cuando te cuestionas tus creencias vas a descubrir si estas te sabotean o no.

También hay emociones saboteadoras como la culpa, el miedo, la ansiedad, la rabia y el resentimiento que te impiden avanzar.

Y que me dices de tus hábitos? Sabes cuales son los positivos y cuales son los limitantes que te impiden lograr tus metas?

Como te va con tus excusas? Solo reconociendo que en ti esta el poder es que podrás llegar a tu realización personal y al éxito.

¿Como te puedes ayudar en este proceso y hacer mas fácil tu camino?

Aprende a observarte a ti mismo y a tu entorno de una manera diferente,

Toma conciencia de los tropiezos que encuentras,

Aprende de cada tropiezo y vuélvelo a intentar.

Atrévete a hacer algo diferente,

Se creativo,

Dale un lugar preponderante a tus valores,

Reafirma tu autoestima,

Ten confianza en ti mismo, tu tienes todo el potencial dentro de ti, solo tienes que sacarlo y ponerlo en practica,

Comprométete con lo que quieres lograr,

Elabora una estrategia de acción,

Actúa. Lleva tu estrategia a la acción.

Se flexible en los cambios que tengas que realizar para alcanzar el éxito,

Se exitoso y no te duermas en tus laureles.

Sueña y no permitas que nada ni nadie te aleje de tus sueños.

“Yo no he fracasado solo he encontrado 10.000 formas que no funcionan.”
-Thomas Edison

He fallado más de 9000 tiros en mi carrera. He perdido casi 300 juegos. 26 veces he sido confiado para hacer el tiro ganador y he fallado. He fallado una y otra vez en mi vida y es por eso que he triunfado.”
– Michael Jordan

martes, 29 de junio de 2010

ERES ZANAHORIA, HUEVO O GRANO DE CAFE?


¿ERES ZANAHORIA, HUEVO O GRANO DE CAFÉ?

En estos tiempos que vivimos, cuando las cosas se suceden tan rápido y cada minuto es un reto y cada segundo hay que tomar una decisión, ¿Tu como enfrentas situaciones adversas?

Si tu actitud es de desconcierto, abatimiento, frustración, tristeza, desgano, si te sientes cansado de luchar o de perseguir tus sueños, me gustaría compartir un cuento contigo:

“Una hija se quejaba con su padre acerca de su vida y como las cosas le resultaban tan difíciles siempre. No sabia como hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar y parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.

Su padre, un chef de cocina, la llevo a su lugar de trabajo. Allí lleno tres ollas con agua y las coloco sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo.

En una echo zanahorias, en otra echo huevos, y en la ultima echo granos de café. Las dejo hervir sin decir palabra.

La hija espero impacientemente, preguntándose que estaría haciendo su padre. A los veinte minutos, el Padre apago el fuego y saco las zanahorias, los huevos y los granos de café y los coloco cada uno en un plato.

Mirando a su hija le dijo: ¿Hija que ves?

Zanahorias, huevos y granos de café fue la respuesta.

La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias, ella lo hizo y sintió que estaban blandas.

Después le pidió que tomara un huevo y lo rompiera, ella lo hizo y después de sacarle la cáscara observo el huevo duro.

Luego le pidió que probara el café, ella sonrío mientras disfrutaba de su rico aroma.

Mirando a su Padre humildemente le pregunto:

¿Qué significa esto padre?

El le explico que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: Agua hirviendo, pero habían reaccionado de una forma diferente.

La zanahoria llego al agua fuerte y dura, pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil y fácil de deshacer.

El huevo había llegado al agua débil, su cáscara frágil protegía su interior liquido, pero después de estar en el agua hirviendo su interior se había endurecido.

Los granos de café, sin embargo, eran únicos…después de haber estado en el agua hirviendo, habían cambiado el agua.

¿Cuál eres tu? Le pregunto el padre a su hija.

¿Cuándo la adversidad llama a tu puerta como respondes?

¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café?

¿Eres una zanahoria que parece fuerte, pero cuando la adversidad y el dolor te tocan te vuelves débil y pierdes tu fortaleza?

¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable y un espíritu fluido, pero después de una situación adversa te has puesto duro y rígido. Por fuera te ves igual, pero por dentro estas amargado y áspero con un espíritu y un corazón endurecido?

¿O eres como un grano de café? El café cambia el agua hirviendo que es el elemento que le causa dolor, y cuando el agua llega a su punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor.

Si eres como el grano de café entonces cuando las cosas se ponen difíciles o peor, tu reaccionas mejor y haces que las cosas que están a tu alrededor mejoren.”

¿Y tu como manejas la adversidad?

¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café?...

Acuérdate que el oro para ser purificado debe pasar por el fuego, así el ser humano necesita de situaciones adversas para fortalecer su carácter, y todo depende de nuestra actitud para enfrentar las pruebas que se presentan en nuestra vida.

Te dejo con esta reflexión.

miércoles, 26 de mayo de 2010

SABES CUALES SON TUS MIEDOS?


¿CUALES SON TUS MIEDOS?

Nuestros miedos nos generan ansiedad , nos angustian, y muchas veces hasta nos paralizan, nosotros somos los responsables que el miedo crezca y se asiente en nuestro interior, y muchas veces lo alimentamos y convivimos con el aun a costa de nosotros mismos y de nuestro bienestar. Nos acostumbramos a vivir con nuestros miedos y nos creemos que son insuperables.

Te son familiares estas frases :

- “Yo no voy a poder”

- “No soy creativo”

- “No me atrevo”

- “Mejor lo dejo para después”

Estos son pensamientos temerosos que no nos ayudan a vencer nuestros miedos, mas bien son los que los alimentan, acuérdate que tu eres tus palabras, estos dichos son afirmaciones sobre nosotros mismos que nos quitan el impulso, nos quitan el valor, no son inspiradoras y sobre todo nos limitan en nuestras acciones.

El miedo es una emoción desagradable y es provocada por la percepción de un peligro real o imaginario que limita nuestra capacidad de control y nuestro desempeño eficiente. El miedo nos predispone para la acción y muchas veces nos paraliza.

Cuando eres niño tus miedos pueden ser, miedo a la oscuridad , miedo a los extraños, miedo a los animales, miedo a nadar… los niños generalmente tienen miedo después de haber vivido una experiencia desagradable. En el colegio puedes sentir miedo a no ser aceptado, miedo a la censura, miedo a hablar en publico, miedo a la muerte, miedo al fracaso… entre otros miedos. Muchos de los miedos que tienes de adulto tienen sus raíces en situaciones que te pasaron en tu niñez y adolescencia.

El miedo puede provenir de lo desconocido , o de lo que no podemos controlar.

Es muy importante reconocer y aceptar tus miedos, así como identificar la conducta asociada a estos, (Sudoración , palpitaciones, el que te quedes paralizado, mente en blanco, evasión), Después de la aceptación tienes que enfrentarlos para poder superarlos.

A Continuación algunas preguntas que seria bueno que te contestes a ti mismo:

¿A que le tengo miedo?

¿Este miedo desde cuando lo siento?

¿Proviene de una experiencia del pasado?

¿Mis padres también sentían el mismo miedo que siento yo?

¿Que áreas de mi vida se afectan con este miedo?

¿Qué me estoy perdiendo, que cosas estoy dejando de vivir por este miedo?

¿Mis miedos son reales o imaginarios?

¿Qué es lo peor que me puede pasar si hago algo diferente?

Atrévete a hacer algo diferente y evalúa que te sucedió, el miedo es una emoción que necesita ser vivida pero que puede transformarse.

Transforma tus miedos en fortalezas, no te quedes atrás por miedo, no vivas con la sombra del temor, no vivas de lo que hubiera podido ser o de lo que hubieras podido hacer, la vida es un aprender constante, no tengas miedo de vivirla.

¿Cómo aprender a nadar sin meterse al agua?,

¿Cómo aprender a caminar sin caerse?

Actúa , equivócate, aprende de tus errores, acepta los riesgos, se el lider de tu propia vida.

viernes, 9 de abril de 2010

ERES PERFECCIONISTA?


¿Eres perfeccionista?

¿Te obsesionas con los detalles?

¿Quieres hacerlo todo tu porque no confías en los demás?

¿Si algo sale como no lo esperabas te culpas por algún tiempo?

¿Cualquier cambio te estresa, no te gusta la improvisación?

¿Te estresas, te da dolor de cabeza, te frustras cuando algo no sale como lo planeaste aun sabiendo que era un imposible en ese momento?

¿Revisas una y otra vez todo lo que haces?

¿Eres puntual?

¿Eres ordenado?

¿Planificas tus actividades?

¿Eres de los que dicen: “ Nadie puede hacerlo mejor que yo”?

¿Terminas un trabajo y te decepcionas, piensas siempre que debiste hacer algo mas?

¿Te comprometes solo con lo que puedes hacer perfecto, sino no lo haces?

Todas estas son algunas características de las personas perfeccionistas.

El perfeccionismo es una cualidad , pero también puede ser un defecto, lo importante es encontrar un equilibrio en el cual el ser perfeccionista nos deje una ganancia positiva, y nos haga crecer como personas.

El defecto de ser perfeccionista esta por ejemplo en invertir mucho tiempo y energías en un trabajo o en un objetivo imposible de cumplir en ese momento, el perfeccionista en ese caso pierde su eficiencia en lo que hace, y tiene un desgaste emocional innecesario. si trabaja en grupo lo que logra es agobiar a los demás sin ningún resultado positivo.

Generalmente las personas que tienen el defecto de ser perfeccionistas son:

- Obsesivas en todo lo que hacen.

- Se centran en los detalles y no ven la figura completa por lo que algunas veces pierden su objetivo en la vida.

- Son personas que no disfrutan con lo que hacen y su nivel de estrés es muy elevado.

- Son personas controladoras que sufren por lo que no pueden controlar.

- Observan con una mirada critica a los demás.

- Son difíciles de complacer.

- Cuando terminan un trabajo se decepcionan con el resultado.

- No encuentran satisfacción en lo que hacen.

- Tienen un exceso de control y exigencia que se hace obsesivo con ellos mismos y con los demás.

- Planean con mucha anterioridad y no admiten errores, y menos fracasos.

- No saben delegar, o delegan con desconfianza.

- Son muy exigentes y no entienden las limitaciones humanas, las circunstancias imprevisibles.

- No consideran su intuición y creatividad.

- Son personas muy inseguras.

- También estas personas perfeccionistas negativas suelen tener pensamientos como: “ lo hago perfecto hasta el final o no lo hago” y por estos pensamientos sus actos son muy limitados.

- Les cuesta comprometerse y abandonan tareas que podrían hacer muy bien porque temen no satisfacer sus expectativas y las de los demás.

- No aceptan sus errores.

- Tienen una actitud pesimista lo que provoca que no corran riesgos y sus acciones se ven restringidas por miedo al fracaso.

El ser humano es por naturaleza perfectible en si mismo y desde si mismo, lo importante es crear una línea que diferencie lo que es realmente importante y lo que no lo es, es importante reconocer que hay metas que se pueden cumplir mas fácilmente y en menor tiempo que otras.

El perfeccionista positivo es el que anda por el camino de la perfección, el que sabe que como ser humano es perfectible pero no es perfecto, la cualidad de ser perfeccionista desde este punto de vista incluye valores como el orden, la puntualidad, la disciplina, la responsabilidad, la ilusión, la esperanza, el desprendimiento, la comprensión, la rectificación y el respeto.

Tendríamos que considerar que la perfección es el camino y no la meta.

Es propio del ser humano querer prosperar, ser cada día una mejor persona, alcanzar sus metas, ser exitoso , alcanzar la felicidad.

Nada en exceso es bueno, ya que se pierde el equilibrio y el balance, por eso es muy bueno ser perfeccionista , pero no en exceso.

Seria interesante que reflexiones si eres perfeccionista y que características tienes, si eres perfeccionista reconoce si para ti es un defecto o una cualidad, y si es un defecto te sugiero que tomes acción para corregirlo, ya que un perfeccionismo excesivo puede ocasionarte trastornos obsesivo-compulsivos, depresión, ansiedad y estrés, y si es una cualidad te felicito, esta cualidad te va a ayudar a lograr las metas que te propongas y seguir creciendo y enriqueciéndote como persona.